jueves, 28 marzo, 2024

Murieron 185 mil personas por siniestros viales en los últimos 25 años, “como si hubiera desaparecido una ciudad entera”

Lo planteó el profesor Mario Funes, capacitador de la ONG Luchemos por la Vida quien insistió en la “ausencia de controles efectivos y sanciones eficaces”, la inexistencia de campañas de prevención desde el Estado y el incumplimiento de la Ley Nacional de Tránsito, que ordena que se dicte Educación Vial en el nivel inicial, primario y secundario.

“La primera causa de muerte en personas por debajo de los 34 años es por causas evitables, y esto es trágico”, comenzó diciendo el profesor Mario Funes, referente de la ONG Luchemos por la Vida, en diálogo con un medio provincial este jueves, al analizar el dramático dato de la cantidad de víctimas fatales por siniestros viales, de los cuales, la mayoría son varones

Según informó Luchemos por la Vida este jueves, los siniestros de tránsito son la principal causa de muerte de los jóvenes de entre 15 y 34 años de edad. En Argentina, cerca de 3.000 perdieron la vida en 2021. Mueren más por esta causa que por cualquier tipo de enfermedad. Y el 71% de ellos son varones.

En diálogo con este medio, Funes insistió en que hubo en el país, “185 mil muertes por siniestros viales en los últimos 25 años, es como si hubiera desaparecido una ciudad entera. Aquí es fundamental la educación vial. La ley nacional de tránsito establece que se debe dar en los niveles inicial, primario y secundario, pero no tenemos una materia curricular en estos niveles educativos”, puntualizó Funes.

siniestro en el que murieron dos hermanos en Cipoletti

Consultado sobre la altísima prevalencia de los varones en los siniestros viales con desenlace fatal, Funes explicó: “Se debe a dos cuestiones, en el marco de nuestras estadísticas, las mujeres tienen una conducta más responsable. Y por las características de los jóvenes que se autoperciben varones en el contexto del grupo”, sostuvo Funes, apuntando a la “educación basada en géneros y no en humanidades” que reciben los varones, lo cual, en determinadas situaciones, los lleva a asumir determinada actitud frente al riesgo.

Según Funes, “los efectos de medicamentos u otra droga ilegal” afectan a la conducción, “que es algo mucho más complejo que manejar, que es sólo destreza”. En ese marco, puede haber una “distorsión entre el riesgo subjetivo y el riesgo objetivo, allí aparecen las conductas riesgosas. No pueden seguir muriendo jóvenes por causas evitables”, insistió Funes, añadiendo que “en la mitad de los siniestros viales está presente el alcohol”.

“Conducir alcoholizado es una actitud riesgosa”, puntualizó Funes, al tiempo que pidió desmitificar un punto. “Cultura alcohólica es saber la diferencia entre un vino Sirah y un Cabernet, no la resistencia del cuerpo al alcohol, una sustancia llega a la sangre y en el cerebro adormece las células responsables de la conducta voluntaria”, argumentó.

Finalmente, Funes aclaró que no se puede saber si la actual ley de tránsito es mala o buena, porque nunca se puso en práctica en su totalidad. “Pero faltan controles eficaces y sanciones efectivas. Si no se pone en práctica” y si se pusiera en práctica “terminamos con el mito de ‘no pasa nada’”

(Fuente: Misiones Cuatro)