Una agente penitenciaria de tan solo 25 años llegó en paro al Hospital de Leandro N. Alem desde San José, donde vivía junto a su familiaS%3DALNI_Maj4-Ha0t6nkEjYG3J7vcywQHVQBw&prev_fmts=0x0%2C360x300&nras=1&correlator=4321642879482&frm=20&pv=1&ga_vid=1223911564.1616372598&ga_sid=1616679346&ga_hid=1263617327&ga_fc=0&rplot=4&u_tz=-180&u_his=1&u_java=0&u_h=760&u_w=360&u_ah=760&u_aw=360&u_cd=24&u_nplug=0&u_nmime=0&adx=0&ady=1476&biw=360&bih=631&scr_x=0&scr_y=143&eid=44736525%2C44737458%2C31060474%2C44739387%2C21066973&oid=3&pvsid=4417512417665836&pem=613&rx=0&eae=0&fc=1920&brdim=0%2C0%2C0%2C0%2C360%2C0%2C360%2C631%2C360%2C631&vis=1&rsz=%7C%7CeEbr%7C&abl=CS&pfx=0&fu=8320&bc=31&ifi=3&uci=a!3&btvi=2&fsb=1&xpc=Rh0TlGy2sx&p=https%3A//www.primeraedicion.com.ar&dtd=1642
La joven, madre de dos niños, comenzó con fiebre y decaimiento el martes por lo que notificó de su situación a la Unidad Penitenciaria de Cerro Azul donde trabajaba y el miércoles fue a hisoparse al puesto Centinela, en San José, y dio resultado positivo para COVID-19.
Pese a no tener enfermedades de base y a su corta edad, su estado de salud empeoró en las horas siguientes y lamentablemente no llegó con vida al Hospital de Alem donde fue derivada para su atención.
Su círculo cercano sospecha que la joven haya contraído una de las nuevas variantes del SARS COV-2 por la forma en que se desarrolló la enfermedad y el abrupto final.
(Fuente: Primera Edición)
